Poda de setos en Madrid.

Cuidado plantas

Poda de setos en Madrid.

  • La poda de setos puede realizarse de dos maneras, formal y no formal. La poda formal es aquella mediante la cual se da forma geométrica al seto, y requiere al menos dos podas anuales. La poda no formal, consiste en dejar crecer libremente el seto, y realizar a lo sumo una poda anual, para revitalizar a la planta.

La poda de setos formal, es la más frecuente y es la que consiste en darle formas geométricas. Es necesario un recorte periódico para la conservación de la forma. La poda de setos no formal, es aquella en la que el seto se deja crecer libremente, pudiendo reducirse a una vez al año, o prescindir de ella totalmente. Es la que se emplea en los setos con flores, y puede emplearse en los setos con espinas.

Poda de setos formal:

En primera instancia, se deja libre al seto hasta que alcance la altura deseada. En caso de que algunos brotes sobresalgan excesivamente, y exista riesgo de que la planta se debilite, se cortarán. Este método sirve para poda de setos de 1.5m máximo, para mayor altura, es necesario descabezar el seto cuando alcanza el 1.5m, para que ramifique y aumente su densidad. Este procedimiento evita que el seto quede despoblado en algunas zonas. Esto no es válido para coníferas, ya que deben dejarse crecer hasta la altura deseada.

Luego de alcanzada la altura deseada, se requieren dos podas anuales al año, por lo menos. La primera

poda, debe hacerse durante el crecimiento de primavera, para que genere un alto en el crecimiento de la planta. La segunda poda de setos debe hacerse a fines del verano, para controlar el rebrote de otoño.

Esto para climas templados a fríos, pero en climas más cálidos, es necesario aumentar el número de podas, para que se mantengan las líneas del seto.

La poda de setos puede realizarse de dos maneras: formal y no formal.

Poda de setos

Consejos para la poda de setos:

  • La poda de setos regular mejora la forma de la planta y permite airear el centro del follaje.
  • Deben eliminarse todas las ramas muertas, podridas o rotas, así como el exceso de vegetación y los tallos secos.
  • Eliminar los brotes (chupones), las ramas que desborden el volumen de la copa y el crecimiento desordenado.
  • Eliminar las flores marchitas.
  • Al cortar ramas grandes, es mejor hacerlo en dos veces, primero la rama, y luego el tocón final. Es preferible retocar con una navaja, para que el corte cicatrice mejor y quede limpio.
  • Antes de eliminar una planta, debemos asegurarnos de que está muerta. Esto se verifica raspando la corteza, si se ve verde o blanco, está viva.

 

 

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